Para interpretar un papel dramático es vital disponer de una potente voz
y poder proyectarla con eficacia para que el auditorio capte cada frase que sea
dicha.
Para ello hay que dominar nuestra función respiratoria fundamentalmente
estas dos habilidades:
· Capacidad
de introducir la mayor cantidad de aire posible
· Capacidad
de retener y expulsar el aire en tu cuerpo a voluntad
Por eso lo primero que hay que hacer es reforzar los abdominales altos
que son los que van a retener el aire.
A continuación iré describiendo algunos ejercicios de respiración para
potenciar estas capacidades. No son los únicos ni los he inventado yo, los
transcribo a modo orientativo; se pueden ampliar y modificar según nuestras
necesidades y nuestros avances.
Procuraremos poner
gran énfasis en la pronunciación de esta serie de palabras:
Lafalalafa -
lafalalafe - lafalalafi - lafalalafo - lafalalafu.
Labalalaba - labalalabe
- labalalabi - labalalabo - labalalabu.
Lapalalapa -
lapalalape - lapalalapi - lapalalapo - lapalalapu.
Continuar hasta agotar
todas las consonantes, combinándolas siempre con la “l” y con las vocales en la
misma posición que las descritas.
Efectuaremos las
siguientes variaciones:
1 Pronunciar exageradamente cada palabra
2 Pronunciar cada serie entera con una sola
inspiración
3 Pronunciar dos series, sin forzarse, con una sola
inspiración de aire
4 Tratar de hacerlo con 3 series
ESTAS SON
MIS FUENTES:
TEORIA Y TECNICA TEATRAL de Fernando
Wagner
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